¿Qué tal si te digo que tienes un grupo de "amigos" que siempre están contigo, cuidándote, protegiéndote; pero que ni los ves, ni los sientes, ni sabes quienes son?

No..., no son tus ángeles de la guarda... ¿Y qué tal si te digo que de la forma como los trates puede depender tu capacidad de hacer frente a un número importante de enfermedades peligrosas o potencialmente mortales? Sería bueno conocerlos... ¿verdad? Bueno... Te presento a las células NK (del inglés "natural killer"), las células T, las células B y los "macrófagos", miembros del equipo de tu sistema inmunológico, que están allí -siempre- a tu servicio. Ellas son responsables de controlar la invasión de bacterias, microbios, virus, hongos y demás patógenos que entran todos los días a nuestro sistema y además se encargan de controlar la aparición de células malignas o cancerígenas que usualmente ocurre dentro del cuerpo. Para tener una idea de su importancia, basta decir que investigaciones recientes han podido probar que una baja en la actividad y en el número de células T, B y NK está relacionada al desarrollo veloz de varios tipos de cáncer; al contagio del SIDA (algunas investigaciones sugieren que individuos con cantidades voluminosas de células NK no se contagian de SIDA aun cuando hayan sido expuestos al virus); al Síndrome de Fatiga Crónica; la cicatrización de heridas; la hepatitis, y a un sinnúmero de enfermedades y varios tipos de padecimientos auto-inmunes.



LA BUENA NOTICIA ES QUE AHORA EXISTEN PRODUCTOS ESPECIALIZADOS QUE TE PERMITEN RESOLVER TUS PROBLEMAS DE SALUD.

Oncólogos, biólogos, nutricionistas, neurólogos, patólogos, psiquiatras y psicólogos están explorando la conexión entre el cerebro, el sistema inmunológico y el sistema endocrino, y descubriendo cómo nuestro estilo de vida, y específicamente nuestros pensamientos y nuestras emociones, pueden impactar el curso y progreso de una enfermedad y, más aún, hasta la vulnerabilidad que una persona tiene hacia una enfermedad. Se ha descubierto que el estrés y la ansiedad liberan hormonas y neurotransmisores necesarios para el manejo de la situación riesgosa (cortisol, adrenalina, noradrenalina, encefalinas, beta endorfinas), pero que ejercen un poderoso impacto negativo en las células NK, T y B del sistema inmunológico (nuestras "recién conocidas" viejas amigas... ¿recuerdas?), bajando su número e impidiendo su trabajo. Aun cuando las interacciones entre unas y otras son complejas, se puede decir que la principal influencia es que mientras estas hormonas aumentan en todo el organismo, la función de las células inmunológicas se ve obstaculizada: el estrés anula la resistencia inmunológica, al menos de una forma pasajera. Pero ¿si el estrés es constante e intenso esta anulación podría volverse duradera...? La respuesta: es muy posible que sí. Tal parece que es de nuestro mayor interés cuidar bien de estos "recién conocidos" viejos amigos.

UN SISTEMA INMUNOLOGICO SANO DEBE TENER ALGUNAS CARACTERISTICAS COMO:
* MANTENER UN BALANCE
* TENER FUERZA
* SER INTELIGENTE
CUANDO ESTAS CARACTERISTICAS SE VEN AFECTADAS POR MALA NUTRICION, EXCESO DE MEDICAMENTOS Y QUIMICOS, ESTRES Y TANTOS OTROS AGENTES, EL SISTEMA INMUNOLOGICO PIERDE SUS CAPACIDADES PARA PROTEGERNOS Y ES INEFICAZ O SE TORNA "VIOLENTO", APARECIENDO LAS ALERGIAS Y LAS ENFERMEDADES AUTOINMUNES.

LOS FACTORES DE TRANSFERENCIA (TRANSFER FACTOR PLUS) CONTIENEN LA INFORMACION GENETICA QUE PERMITE ELEVAR TU SISTEMA INMUNOLOGICO EN UN 437%, PERMITIENDO RECUPERARTE DE ENFERMEDADES COMO EL CANCER, DIABETES, ARTRITIS, ASMAS Y ALERGIAS, ETC.